Aunque los principios que rigen la seducción son generales, al aplicarlos te habrás dado cuenta de que hay ciertas estrategias, técnicas o rutinas que no aplican en tu caso. Algunas simplemente no te gustan, otras no están alineadas con tu personalidad.
Además de eso, también cuentas con historias y anécdotas que pueden reemplazar perfectamente el material que encuentras en manuales y foros de seducción. Cuando juntas todos esos elementos estás diseñando tu repertorio personal, algo así como el listado de canciones de un artista.
1 – Openers
¿Con qué frase te sientes más cómodo para iniciar una conversación? Mientras te diriges a tu sitio de trabajo, estudio o una discoteca, ve pensando en líneas creativas para abordar mujeres. La idea es estar preparado, nunca sabes en qué momento tengas la oportunidad de conocer una chica que te guste y necesites una línea de entrada.
2 – Negas
La mejor forma de incluir negas en tu repertorio personal es la práctica. Puedes aprenderte una línea que te guste, pero que en lo personal tal vez carezcas de la gracia para decirla sin herir susceptibilidades. Otros negas saldrán producto de las conversaciones con tus amigos, bromas machistas, etc.
Sea de donde sea que los aprendas, ten presente que en algún momento de la cita tendrás que molestar a la chica con la que estás saliendo para demostrarle que no buscas su aprobación y de paso bajarle el ego.
3 – Demostraciones de Alto Valor
¿Qué elementos tienes que te ayudan a destacarte entre la masa de hombres? Proyectar valor es una técnica general para generar atracción, pero pocos hombres parecen conocer sus propias demostraciones DAV´s o la forma correcta de exhibirlas.
Opera lejos de los dos extremos nocivos: la jactancia y la pequeñez. El primero es típico de los hombres que presumen de su dinero, posesiones o trabajo para impresionar a una mujer. La pequeñez es sinónimo de excesiva modestia, lo que hace que hombres con grandes virtudes pasen completamente desapercibido ante las chicas. No presumas, pero tampoco te quedes callado.
4 – Anécdotas
Otro de los puntos que te ayudarán a ser buen conversador, y de paso generar interés, son las anécdotas. Todos tenemos historias que generan impacto en otras personas, ya sea por que son graciosas, relacionadas con un accidente o que sean muy curiosas. Como reglas básicas procura que de verdad sean interesantes y ojalá breves. Las mujeres son muy buenas para escuchar, pero no abuses de ello con una historia interminable.
5 – Algunos chistes
El sentido del humor es un elemento infaltable a la hora de seducir. Con un par de chistes que te sepas es suficiente, siempre y cuando seas bueno contándolos. Luego será el turno de ella, para lo cual conviene no reírse de todas sus bromas. Si tu fuerte es la improvisación y no el chiste prefabricado mejor aún, siempre encontrarás detalles en el contexto para hacerla reír.
Just Livin Man!